Cumplir años de viaje

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Uno no elige cuando cumple años, pero a veces puede elegir donde estar para festejarlo. A mi me tocò ahora. Hace unos dìas veníamos calculando donde podíamos estar o que queríamos hacer y pedì 2 cosas: que ese dia no tuviéramos que viajar y que tenía que haber una torta de chocolate. Por suerte tuve las dos.

Lo más importante para que todo sea perfecto es tener al compañero indicado, y yo no pude haber elegido a uno mejor. El dia anterior se ocupó de, sin que me diera cuenta, conseguir todo lo que necesitaba. Esperò a que me durmiera para hacerme la torta màs rica que me haya preparado. Nada de polvitos mágicos, a la madrugada se puso a batir los huevos con la leche, harina y el chocolate que yo había pedido. Así fue como para mi cumpleaños me despertè soplando las velitas de mi torta de chocolate. Y comiendola, obviamente.

Chocolate, dulce de leche, crema y moras.

Mientras comíamos el segundo desayuno, tipico de Colombia donde estamos (huevos revueltos con tomate y cebolla, arepas, queso, pan y cafè), no decidimos a hacer un tour por la tarde a la comuna 13 de Medellín. Mandamos mensaje y nos anotamos.

Mientras tanto, mis papàs en Argentina me habían hecho una torta, así que pude soplar las velitas a la distancia.

Fue el unico dia de nuestra estadìa en esta ciudad que no lloviò. En el medio del tour, en una presentaciòn de un grupo de rap me cantaron el feliz cumpleaños, aunque al contarle a una amiga, ella lo hizo mejor por Whatsapp. También lo festeje jugando en un tobogán, como hago con cada uno que veo.

Finalmente fuimos a cenar para terminar un gran dia como se debe. Comimos comida típica nuestra, cosa que extrañamos bastante, con la sorpresa de que por ser cumpleaños, pagamos la mitad.

Como regalo, el equipo que capitaneaba en la Universidad me regalò algo que buscábamos hace mucho tiempo; me dedicaron el primer puesto en el torneo que se realizaba este mismo dia.

Ademàs, si pasas tu cumplaños viajando, tu dia especial dura más horas dependiendo donde estes. En mi caso fueron 26 horas; a las 10 de la noche del día anterior recibí la primer llamada y hasta las 12pm del día siguiente segui recibiendo mensajes. Además tenemos restos de torta para unos cuantos días más.

Repito, lo que hizo perfecto este día fue estar acompañada de esa persona tan especial con la que decidì hacer este viaje. De no ser por èl no se qué hubiera pasado.

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